jueves, 30 de agosto de 2012

Se acaba la farsa

Hoy el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación falló en contra de la impugnación presentada por las Izquierdas con miras a declarar nula la elección presidencial del 2012. Con ello se acaba la farsa montada por unos mercenarios de la democracia.
No fueron suficientes pruebas, ni los argumentos, ni los artilugios su para pretender violentar los principios legales de la elección presidencial y con ello buscar su nulidad. Los Magistrados en una exposición brillante, postularon su dictamen para detener de una vez por todas a esa banda de difamadores y calumniadores profesionales.
Ni los puercos, bueyes, pollos y demás animales pudieron influir para destruir el proceso electoral celebrado en paz y en orden. Ahora vendrá el zafarrancho de los demócratas quienes violentarán ahora a las instituciones y buscarán a como dé lugar descalificar a las autoridades y sus resoluciones.
Ya es tiempo de pensar en México y no en ambiciones personales, construidas desde hace doce años. Queremos paz y concordia.

¡Enhorabuena Senadores!

Hoy dio paso la democracia al instaurarse la nueva Legislatura de la Honorable Cámara de Senadores. Las nuevos dueños de los escaños tienen una agenda pendiente, hay muchas reformas guardadas, ojalá sean todas en beneficio de los mexicanos y no para sus partidos.
Cabe mencionar y reconocer el esfuerzo realizado por Alfonso Lujambio, el cual como persona, merece todo mi respeto y admiración. El Mtro. Lujambio está librando una batalla contra el cáncer y hago votos y oraciones por su pronto restablecimiento. Pero fue un hecho heroico el levantarse y tomar protesta de su nuevo cargo como Senador.
Espero la nueva Legislatura, ponga primero los intereses de México para poder construir los acuerdos necesarios para construir un país sediento de grandeza. No nos defrauden.
¡Enhorabuena Senadores!

domingo, 26 de agosto de 2012

¿A dónde iremos?

Nuestro caminar nos invita a dar pasos más seguros hacia Cristo, en el XXI Domingo del Tiempo Ordinario (Jn 6, 60 – 69), encontramos el camino.
“Después de oírlo, muchos de sus discípulos decían: "¡Es duro este lenguaje! ¿Quién puede escucharlo?".
Jesús, sabiendo lo que sus discípulos murmuraban, les dijo: "¿Esto los escandaliza? ¿Qué pasará, entonces, cuando vean al Hijo del hombre subir donde estaba antes?
El Espíritu es el que da Vida, la carne de nada sirve. Las palabras que les dije son Espíritu y Vida. Pero hay entre ustedes algunos que no creen". En efecto, Jesús sabía desde el primer momento quiénes eran los que no creían y quién era el que lo iba a entregar. Y agregó: "Por eso les he dicho que nadie puede venir a mí, si el Padre no se lo concede".
Desde ese momento, muchos de sus discípulos se alejaron de él y dejaron de acompañarlo. Jesús preguntó entonces a los Doce: "¿También ustedes quieren irse?". Simón Pedro le respondió: "Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de Vida eterna. Nosotros hemos creído y sabemos que eres el Santo de Dios"”.
Hemos venido meditando a lo largo de los pasados domingos los grandes milagros y palabras de Jesús, pero ahora es tiempo de apretar el paso. Al ir avanzando es necesario poner objetivos y metas más ambiciosas, por eso muchos se espantaban de escuchar a Cristo.
Es necesario crecer, avanzar en la vida del seguimiento de Cristo, muchas veces es doloroso, porque como los músculos al crecer, deben romperse para endurecerse; si el grano de trigo no muere, queda infecundo. Por eso es el momento de enfrentarnos a la verdad, para ir encontrando los elementos los cuales nos impiden responder al llamado de amor.
Por eso nos dice Cristo, nadie puede ir tras de Él si su Padre no lo concede. Por tanto, no es mérito nuestro si quiera aspirar a seguir a Jesús, por ello a Dios, la gracia es del Padre para ir en su búsqueda.
Con esa confianza debemos renovar nuestra fe, porque no ha habido nadie quien Dios ha escogido que se pierda. Quien no tiene fe en Dios es cuando se cuestiona la utilidad de seguirle, porque el proyecto de Jesús, es a la grande, es demandante, cuesta trabajo pero vale la pena luchar por Él.
Cuando muchas personas se cuestionan en su vida ¿a dónde iremos? La respuesta en sencilla, en Cristo, quien como dice Pedro, Él tiene palabras de vida eterna, nosotros creemos en Él y Él es el santo de Dios.

sábado, 25 de agosto de 2012

Un pequeño y un gran paso

Hoy el primer hombre quien puso un pie sobre la Luna ha muerto. El Coronel de la Fuerza Aérea Norteamericana, Neil Armstrong llevó a cabo su viaje final, al cielo. Todos recordamos sus inmortales frases a la llegada al satélite terrestre el 21 de julio de 1969, “That's one small step for man, one giant leap for mankind”
Neil Armstrong brindó a la humanidad la capacidad de creer en grande, de darnos cuenta de la importancia de ir más allá de nuestros propios límites, los cuales son más altos, más grandes y muchas veces más complicados. Pero un pequeño paso permiten ir al siguiente, es el inicio para un gran paso, así toda la vida se compone de un pequeño y un gran paso.
¡Buen viaje Coronel Armstrong!

viernes, 24 de agosto de 2012

Un poco de todo

Las semanas transcurridas han sido testigos de diversos hechos, desde el escándalo de la banda de 2.5 expropiada a MVS, la desarticulación de las supuestas pruebas del fraude electoral; el artículo de Le Monde sobre el fracaso de la “guerra contra el crimen”; los fanáticos religiosos en Nueva Jerusalén y por supuesto, la cereza del pastel, la balacera a una camioneta de la Embajada de los Estados Unidos.
Hace dos semanas el gobierno expropió a la empresa MVS la banda 2.5 del espectro radioeléctrico. Dicha acción ha generado una serie de especulaciones y revelaciones dignas de una novela. El gobierno federal insiste en la justicia en la expropiación por no llegar al acuerdo con la empresa de la familia Vargas, pero en realidad, dicha acción “legal” se debe a la revancha por los dichos de la periodista Carmen Aristegui, quien cuestionó sobre un supuesto alcoholismo por parte de Felipe Calderón.
El punto central es el pleito ya recurrente con la supuesta libertad de expresión de nuestro país. Un periodista debe ejercer su derecho a informar de forma responsable, pero también no debe ser sujeto a persecución por sus dichos. En el fondo también se ve la disputa de poderes entre los grandes concesionarios, quienes están afilando los cuchillos para obtener una tajada de la banda.
Por otro lado, el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación ha comenzado poco a poco a desechar las supuestas pruebas de las “irregularidades” en el proceso electoral del pasado julio, provistas por el Movimiento Ciudadano.
Después de llevar un corral y otra serie de objetos, los magistrados han afirmado la improcedencia de las pruebas, sólo falta esperar el fallo a los documentos presentados y así poder dar la constancia de mayoría al candidato ganador. El problema será las acciones siguientes de Andrés Manuel al verse derrotado nuevamente. Seguramente las posteriores medidas serán radicales.
En otras cosas, en el Estado de Michoacán en un poblado llamado Nueva Jerusalén, un puñado de fanáticos religiosos, ha impedido a los niños y jóvenes de esa comunidad el poder tomar clases. En acciones anteriores incendiaron las instalaciones escolares y lo siguiente fue detener el inicio del ciclo escolar.
Lo triste del caso es la imposibilidad de las autoridades para impedir este tipo de actividades, pero más aún, la Secretaría de Gobernación, no ha tomado cartas en el asunto para limitar el florecimiento de este tipo de sectas nocivas y destructivas. Ahora esperemos en qué concluirá el conflicto en ese ya de por sí, lastimado Estado del país.
¡La cereza del pastel! Hoy por una confusión, elementos de la Policía Federal, balearon un vehículo diplomático procedente de la Embajada de los Estados Unidos. Gracias a la oportuna intervención de un miembro de la Secretaría de Marina, fue que el incidente no terminó en una catástrofe internacional.
Un poco de todo, pero pronto veremos el desenlace de algunos de los hechos comentados, esperando sean para bien.

domingo, 19 de agosto de 2012

Ahí está la Vida Eterna

El XX Domingo del Tiempo Ordinario (Jn 6, 51 – 58) nos da las claves para la vida eterna.
“Yo soy el pan vivo bajado del cielo. El que coma de este pan vivirá eternamente, y el pan que yo daré es mi carne para la Vida del mundo".
Los judíos discutían entre sí, diciendo: "¿Cómo este hombre puede darnos a comer su carne?". Jesús les respondió: "Les aseguro que si no comen la carne del Hijo del hombre y no beben su sangre, no tendrán Vida en ustedes.
El que come mi carne y bebe mi sangre tiene Vida eterna, y yo lo resucitaré en el último día. Porque mi carne es la verdadera comida y mi sangre, la verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre permanece en mí y yo en él.
Así como yo, que he sido enviado por el Padre que tiene Vida, vivo por el Padre, de la misma manera, el que me come vivirá por mí. Este es el pan bajado del cielo; no como el que comieron sus padres y murieron. El que coma de este pan vivirá eternamente"”.
El hombre es capaz de poner obstáculos en el proyecto de Dios, porque se niega a creer realidades sobrenaturales, las cuales le sobrepasan. Por eso aún con escuchar a Cristo una y otra vez sobre la vida eterna y lo necesario para ello, seguimos dudando, cuestionando y objetando.
Cristo nos invita a descubrir en Él el pan de vida, explica el sentido de su afirmación, estaba anunciando la Eucaristía, ahí está la vida eterna. Ahí también nos advierte el hecho de no preocuparnos por lo material, por un pan caduco, por algo intrascendente, sino en los bienes eternos.
La Eucaristía se debe convertir en el fundamento de nuestra existencia, porque estamos apostando a lo grande, el proyecto de Jesús es demandante y exigente, es para la Vida Eterna.
Ahí está la Vida Eterna, si permanezco en Cristo, permanezco en su amor, si puedo recibirlo con la consciencia tranquila, quiere decir que Dios está obrando en mí, entonces es cuando puedo experimentar la felicidad verdadera.

martes, 14 de agosto de 2012

Descanse en paz un grande Marvin Hamlish

Thanks London, Olá Brasil

El domingo concluyó la justa olímpica, todos los quedamos sorprendidos por las proezas realizadas por los hombres y mujeres, quienes son unos verdaderos titanes. Atletas entregados y disciplinados quienes nos regalaron dos semanas donde honramos al ser humano y cómo es capaz de superar sus propios límites.
Desde la ceremonia de inauguración a la de clausura, los británicos sorprendieron al mundo por su capacidad para responder al reto de la organización de las Olimpiadas.         Cada una de las ceremonias dejó muy en claro la capacidad de los ingleses y lo amplio y basto de su cultura en todos los aspectos. Pasamos de ver a Mister Bean a grandes actores, cantantes, grupos e intérpretes.
Pero todo lo bueno tiene un final, entonces hoy decimos thanks London, Olá Brasil.

domingo, 12 de agosto de 2012

No murmures

Llegamos al XIX Domingo del Tiempo Ordinario (Jn 6, 41 – 51), donde Cristo se presenta como el camino al Padre.
“Los judíos murmuraban de él, porque había dicho: "Yo soy el pan bajado del cielo". Y decían: "¿Acaso este no es Jesús, el hijo de José? Nosotros conocemos a su padre y a su madre. ¿Cómo puede decir ahora: 'Yo he bajado del cielo'?"
Jesús tomó la palabra y les dijo: "No murmuren entre ustedes. Nadie puede venir a mí, si no lo atrae el Padre que me envió; y yo lo resucitaré en el último día. Está escrito en el libro de los Profetas: Todos serán instruidos por Dios. Todo el que oyó al Padre y recibe su enseñanza, viene a mí.
Nadie ha visto nunca al Padre, sino el que viene de Dios: sólo él ha visto al Padre. Les aseguro que el que cree, tiene Vida eterna. Yo soy el pan de Vida. Sus padres, en el desierto, comieron el maná y murieron. Pero este es el pan que desciende del cielo, para que aquel que lo coma no muera.
Yo soy el pan vivo bajado del cielo. El que coma de este pan vivirá eternamente, y el pan que yo daré es mi carne para la Vida del mundo"”.
Quien no es capaz de comprender el proyecto de Dios murmura contra Él, es señal inequívoca de una persona carente de fe. El murmullo es la condición propia de quien duda.
Es cuando Cristo nos da alcance en el camino y nos pide ¡no murmures! Ten confianza en mí, porque Yo Soy el camino al Padre. En esa promesa es llegar al camino a la vida eterna, la cual se tiene en la resurrección.
Jesús nos dejó nos ha dado el mejor regalo, su cuerpo y su sangre, por eso nos dice “Yo soy el pan vivo”, el que coma de este pan vivirá para siempre, porque es vida para el mundo.
Hoy queremos pedirle, danos siempre de ese pan.

jueves, 9 de agosto de 2012

Con gratitud al provenir

Ya es cada vez más cercano el poder tener la gracia de iniciar una nueva etapa, una nueva década, mis tres anteriores han sido como lo he expresado a lo largo de las entregas anteriores muy especiales, pero también espero con gran gratitud al porvenir.
El futuro es uno de los grandes temores del hombre, porque para quien no tiene fe, se presenta incierto, para los carentes de esperanza, se presenta sombrío y para los carentes de caridad, es un suplicio.
Yo espero el futuro con gran ánimo y entusiasmo, porque lo he mencionado en las entregas anteriores, no voy solo, llego a mi trigésimo aniversario con una energía renovada y con muchas ganas de emprender nuevos proyectos, retos y aventuras. Eso sí, con mucha fuerza para avanzar y seguir alcanzando mis metas.
Una de las cosas por las cuales estoy agradecido es por quien voy a compartir mi vida y por la familia que formaremos. Ese es parte de un futuro al cual llegaré y el cual me permitirá crecer como persona y madurar.
El futuro por tanto, pinta muy grato, comenzaré una nueva década, con la gracia de Dios y con todos mis compañeros de viaje, empezando por mis padres, familia, amigos, maestros y formadores.
Espero los 30 con gran alegría y entusiasmo, porque así ha sido mi vida, pero también quiero llegar al final del peregrinar haciendo mías las palabras de San Pablo: “…ho combattuto la buona battaglia, ho terminato la mia corsa, ho conservato la fede…” (“he peleado la buena batalla, he terminado la carrera, he mantenido la fe”) (2° Tim 4, 7 – 8 ).

miércoles, 8 de agosto de 2012

A cuatro días y tanto para agradecer

La vida del hombre también se constituye por sombras, por situaciones complicadas y por malos testimonios brindados, consciente o inconscientemente. Son grandes oportunidades para crecer, para madurar, pero también, el recordatorio de vivir en humildad. A cuatro días y tanto para agradecer, es momento de reconocer esos aspectos.
En vísperas ya de la llegada de mi trigésimo aniversario, es bueno hacer un alto para ofrecer disculpas a quienes no he dado un buen testimonio, no recibieron una palabra de afecto, fui ruido o motivo de escándalo.
La vida busca recordarte la importancia de la humildad, todos esos tropiezos y esas heridas causadas a otros se convierten en una importante enseñanza para no volverlo a hacer, para resarcir en la medida de lo posible y madurar.
El camino para encontrar la humildad es muy arduo, en ese aspecto, puede ser duro, sin embargo, las veces en las cuales he fallado, siempre he buscado comprender mis errores y enmendarlo.
Gracias a todos quienes han sido pacientes conmigo y a quienes han estado, están y estarán a mi lado, quienes contribuyen con su amistad y sincera corrección fraterna.

martes, 7 de agosto de 2012

A cinco días y tanto para agradecer

Una de las grandes enseñanzas del hombre, es ser consciente de su entorno, es decir, aprender a estar en presente, en cada circunstancia, en ese momento. Dios siempre tiene sorpresas a cada instante. A cinco días y tanto para agradecer, llevo una gratitud especial por la creación.
Las palabras para expresar la belleza de las cosas son limitadas. Usaré las inmortales palabras de San Francisco, las cuales suscribo.
“Dulce es sentir
como mi corazón
ora humildemente
está naciendo amor.
Dulce es entender
que no estoy solo
pero que soy parte de una inmensa vida
que generosamente resplandece entorno a mí.
Es un don de Él de su inmenso amor.
Me ha dado el cielo
y las claras estrellas
hermano Sol y la hermana Luna
La madre tierra
con sus frutos, césped y flores
el fuego, el viento
el aire y el agua pura
fuente de vida para sus creaturas
don de Él, de su inmenso amor,
don de Él de su inmenso amor”.

lunes, 6 de agosto de 2012

A seis días y tanto para agradecer

La vida del hombre transcurre siempre en un plano ascendente. Lo natural deber ser ir creciendo, madurando, para así llegar a un zenit y luego comenzar el camino inverso, lleno de satisfacción, sembrar lo cosechado.
A seis días y tanto para agradecer, hago un alto para reflexionar sobre los aspectos de mi vida laboral, es cierto, me falta mucho por aprender, por conocer, por mejorar, pero lo más importante es la visión al respecto, quiero y tengo ganas de aprender crecer.
Ahí debo mencionar mi amor por la docencia, desde la primera oportunidad en Instituto Oxford desarrollé ese aspecto, la pasión por ayudar a crecer, por ser compañero de aprendizaje de jóvenes quienes están abriéndose paso en la vida. Dios muchas veces no concede ver frutos, porque uno siembra y otro cosecha, pero la demostración de los esfuerzos la tuve hace unos meses.
Posteriormente al integrarme al claustro académico de la Universidad Anáhuac México Sur, descubrí un mundo nuevo, lleno de posibilidades. Aprendí muchísimo más de mis compañeros de estudio, a todos mis alumnos siempre los llevo en mi corazón, porque son unas personas extraordinarias.
Ahora es mi tiempo de cosechar, pero estoy muy agradecido por todas las vivencias profesionales, he conocido gente muy interesante, pero aún cuando no siempre fueron buenas experiencias, tomé lo bueno y lo otro, fueron retos.
Agradezco porque tengo la vitalidad para emprender cualquier cosa, amo los retos, busco siempre ir a más, pero como he mencionado, estoy siempre abierto a aprender, son años de trabajo en la humildad para darme cuenta de la necesidad de aprender.
Estoy empezando una nueva época y pues adelante, con gusto, con un gran sentido de gratitud. Hay un gran entorno para ello.

¿Qué obra realizaste?

El XVIII Domingo del Tiempo Ordinario (Jn 6, 24 – 35), Cristo nos hace una promesa, quien va a Él jamás tendrá hambre ni sed.
“Cuando la multitud se dio cuenta de que Jesús y sus discípulos no estaban allí, subieron a las barcas y fueron a Cafarnaún en busca de Jesús.
Al encontrarlo en la otra orilla, le preguntaron: "Maestro, ¿cuándo llegaste?". Jesús les respondió: "Les aseguro que ustedes me buscan, no porque vieron signos, sino porque han comido pan hasta saciarse.
Trabajen, no por el alimento perecedero, sino por el que permanece hasta la Vida eterna, el que les dará el Hijo del hombre; porque es él a quien Dios, el Padre, marcó con su sello".
Ellos le preguntaron: "¿Qué debemos hacer para realizar las obras de Dios?". Jesús les respondió: "La obra de Dios es que ustedes crean en aquel que él ha enviado". Y volvieron a preguntarle: "¿Qué signos haces para que veamos y creamos en ti? ¿Qué obra realizas?
Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como dice la Escritura: Les dio de comer el pan bajado del cielo". Jesús respondió: "Les aseguro que no es Moisés el que les dio el pan del cielo; mi Padre les da el verdadero pan del cielo; porque el pan de Dios es el que desciende del cielo y da Vida al mundo".
Ellos le dijeron: "Señor, danos siempre de ese pan". Jesús les respondió: "Yo soy el pan de Vida. El que viene a mí jamás tendrá hambre; el que cree en mí jamás tendrá sed”.
Una vez realizada la multiplicación de los panes, la fama de Jesús se extendió por toda la región, la prueba de ello es el texto anterior. Le preguntan ¿cuándo llegaste? Pero no fue por reconocerlo como Mesías, sino porque comieron hasta saciarse. Una recepción injusta, porque la gente lo buscaba por una conveniencia material y no espiritual, no veían los signos de los tiempos.
Por eso, es cuando Jesús clama a las conciencias, trabajen por los dones del cielo, para construir para la vida eterna, para lo importante. Lo demás, es importante dejarlo a la providencia, porque Dios es fiel.
Pero al final, uno comienza a comprender una realidad en mi vida, ¿qué he hecho para hacerme digno de Dios? ¿Mi vida es agradable a Dios? ¿Qué obra realizaste en tu vida, para merecer el amor de Dios?
Tres preguntas de peso, las cuales orientarán nuestra vida en adelante. ¿Qué he hecho para hacerme digno de Dios? La respuesta es nada, no habrá obra suficiente para ser digno de Dios, porque Dios te ama por quien eres. Pero debemos aprender en vivir en libertad para así vivir de cara a Dios.
La segunda pregunta, ¿mi vida es agradable a Dios? Si no nos hemos planteado esa cuestión, hemos desperdiciado la vida. Cuando uno busca ofrecer su vida a Dios, todo cambia y tiene sentido, porque comienza a amar.
¿Qué obra realizaste en tu vida, para merecer el amor de Dios? No hay, pero por el contrario, cuando uno ve los dones del cielo, comprende el hecho de sólo preocuparnos por los dones del cielo. Por ese el Pan que Jesús nos ha dejado, así comprenderemos el hecho de la gratuidad del amor de Dios.
Dios nos ama gratuitamente, no por nuestras obras, sino por quien somos.

domingo, 5 de agosto de 2012

A siete días y tanto para agradecer

Un hombre puede jactarse en cierto momento de ser autodidacta en ciertas cosas, pero de una u otra forma hubo quien le guiara, orientara y mostrara algo. A siete días y tanto para agradecer, quiero hacer un pequeño homenaje a todos mis profesores, maestros, guías y a todo aquél quien tuvo la caridad de enseñarme algo.
La primera educación y formación se recibe en casa, pero una vez avanzadas las etapas, se llega al colegio, donde profesores tienen la grave labor de instruirnos. Mi primer colegio fue el Godwin, donde ingresé a maternal y hoy a tantos años de distancia, lo recuerdo tan vívidamente.
Posteriormente pasé al colegio donde pasé una etapa, de las más felices de mi vida, pero también de las más largas, el CEYCA. Todo lo vivido en el colegio me permitió recibir una instrucción muy adecuada, pero también una formación integral, ahí aprendí muchas cosas, pero lo más importante, la relación con Dios.
Ahí tuve grandes profesores, quienes además de mostrarme su gran conocimiento en su tema, me demostraron una gran calidad humana. Esos grandes hombres, se convirtieron en amigos.
Posteriormente, ingresé a la Universidad Panamericana, donde tuve grandes profesores, quienes me permitieron dar lo mejor de mí y más allá. Aún cuando tuve el honor de ser su alumno poco tiempo, fue suficiente para dejar una huella en mi vida.
Reorientando mi vida, comencé otra etapa muy larga y grata de mi vida, la etapa universitaria en la Anáhuac México Sur. Hombres y mujeres quienes se paraban delante de un salón de clases me permitieron amar mi ciencia y disciplina, atender los pequeños detalles y buscar siempre la excelencia.
Cuánto bien hace una persona entregada a la gran labor de la docencia, del buscar formar conciencias, pero lo más importante, seres humanos íntegros. Una vez, terminada la etapa universitaria, siempre se llega a una etapa profesional, la cual no sería nada sin un adecuado sustento.

A ocho días y tanto para agradecer

Conforme la vida del hombre avanza, crece su familia, personas a quienes ama, quienes se convierten en compañeros de camino, pero también son la familia de elección. A ocho días y tanto para agradecer, es justo recordar a mis amigos.
Dios me ha concedido la gracia de su presencia en mis amigos, quienes son mis hermanos y hermanas, quienes siempre han estado ahí cuando he necesitado aliento, fuerza, coraje; pero también cuando hemos estado en la fiesta, en la bonanza y en la felicidad.
No podría imaginar mi vida sin la presencia de mis amigos, sin su cercanía, sin su calidad humana. Cada uno me ha enseñado algo, me ha dejado una huella en mi corazón indeleble.
Cuando la amistad es, como la cual me puedo preciar de ellos, eterna, porque pudieran pasar muchos años sin vernos, sin tener contacto, pero al volver a verlos es como si la última vez de haberlos visto hubiese sido el día anterior. Todo igual, con excepción del amor, porque es mayor y más maduro.
Agradezco a Dios a cada uno de ellos, porque han sido compañeros de peregrinación, siempre juntos, al mismo paso, cuando he bajado el ritmo, no lo permiten y me han impulsado a dar lo mejor de mí.
A todos ellos les estaré agradecido siempre, tienen un lugar especial en mi corazón y su huella en mi alma.
Mis maestros y formadores, se han convertido en grandes amigos.

viernes, 3 de agosto de 2012

A nueve días y tanto para agradecer

Conforme uno avanza en la vida, comienzan a volverse fundamentales ciertos aspectos o mejor dicho, comienzan a ser fundamentales núcleos. En este ejercicio de reflexión, es importante hacer un alto y a nueve días y tanto para agradecer un elemento vital en la vida de las personas es su familia.
En mi caso, he sido muy afortunado, porque somos una familia pequeña, pero muy unida. En mis hermanas, Anita y Paola, siempre he encontrado un apoyo constante, porque ellas siendo más grandes, me han dado un lugar especial, compartimos muchas cosas y existe una sólida relación de amor. Ellas han formado ya una familia, con mis cuñados, Francisco y Marco respectivamente, brindándome una razón para mi alegría y amor, mis pequeños sobrinos, quienes son mi luz y adoración, mis bodoques, Francisquito y Juan Pablo (quien es mi ahijado) y mi pequeña princesa, Ximena (quien también celebra su cumpleaños en agosto).
Una parte fundamental de toda familia son los abuelos, Mamis (quién ya no está físicamente), Coco y Bobby. De Mamis, la recuerdo con gran cariño, porque fue una mujer dedicada, a quien le tocó vivir situaciones complicadas, pero la hizo más fuerte, de ella aprendí muchas cosas y me sigue cuidando muy de cerca. Mi abuelo Bobby le debo mucho, porque son tantas las vivencias y anécdotas, pero pues ahora el tiempo juega en contra, porque se está olvidando de nosotros poco a poco, pero es momento de estar junto con él, demostrándole el agradecimiento por tanto amor y por su protección constante, porque si algo he aprendido de él es la gratitud.
Mi abue Coco, es un ejemplo de rectitud, de ella he aprendido la alegría, la lucha ante las dificultades, pero también a crecerme ante las adversidades. El estar pendiente de los detalles, de tantas cosas y su apoyo, porque siempre he encontrado amor y comprensión, guía y orientación.
Mis tíos, Enrique, Paty, Jorge, Raúl, Yoya, Ádel y Laura, ellos son compañeros de vida, personas extraordinarias quienes me han dejado una huella profunda y cada uno de ellos a su modo, me han formado y contribuido con mi persona. Todos con una constante, siempre están ahí para mí.
Además de la relación de los hermanos, están unas personas muy importantes, quienes se convierten en compañeros de aventuras, de experiencias y de caminar, mis primos, Patita, Heidi (Mismísima), Ricardo (Juan), Jorge (Karnal) y Alis.
Cuánta gracia y cuánto don, ya cada vez más cerca de los 30 y darte cuenta de la presencia de Dios en mi familia. Porque han hecho patente ese amor eterno, para demostrarlo de forma humana. Cuando te preguntas muchas veces en dónde está Dios, llega la respuesta en la persona de cada uno de los miembros de mi familia.
Me siento muy orgulloso de ser hermano, tío, cuñado, sobrino, primo de todos. Agradezco a Dios por las vidas de ellos, aún cuando algunos ya no estén, Mamis, Raúl y Ádel, pero siempre están en mi corazón. ¿Cómo no voy a vivir agradecido por el don de la familia concedido por Dios?
Me faltan algunas personas quienes por la cercanía se han convertido en familia extendida, ellos son mis amigos.

jueves, 2 de agosto de 2012

A 10 días y tanto para agradecer

Ayer comenzó el mes de agosto, es un mes para mí muy significativo, porque como mencioné en la serie anterior, es la cuenta regresiva en una oportunidad de hacer un alto, a 10 días y tanto para agradecer.
Comenzaba reflexionando sobre los dones recibidos de parte de Dios, los cuales de primera mano, se reflejaban en mis padres. Son tantas las cosas por las cuales agradecerles a ellos, a Adolfo y Ana María, son los primeros en los cuales deposité una confianza ciega, donde me sentí protegido, pero lo más importante amado.
Los relatos de cuando llegué al mundo, son cargados de la emoción propia de ellos, nací el 11 de agosto de 1982 a las 14:30 en el Hospital Santa Teresita. Pero ya desde antes, de nacer, era esperado con mucha emoción y cariño. Si de algo no puedo dudar y jamás lo haré es de su amor.
Han sido casi 30 años de amor, de educación y formación, de sorpresas, risas; no ha habido días negros o situaciones negativas. Siempre he contado con su apoyo incondicional, siempre impulsándome a dar más allá de lo mejor de mí mismo, permitiendo siempre superar mis propias expectativas y permitirme crecer y madurar con toda la responsabilidad de la libertad.
Me lo han dado todo, pero me hicieron consciente del trabajo para obtenerlo. Me formaron para ser abierto al mundo, pero siguiendo mi propia estrella. Me enseñaron a perseguir mis sueños y a nunca derrotarme ante nada, a siempre caminar con la cabeza levantada. También del trabajo arduo, de ser honesto, de ser un caballero.
Claro, todo ello, lo sigo trabajando, porque no seré pieza terminada nunca, siempre habrá aspectos para pulir y mejorar. Pero sé que cuento con ellos hasta el final.
Gracias a ellos, también me regalaron una familia.
Papá y mamá, soy muy afortunado de tenerlos, le doy gracias a Dios por el don de la vida, porque hemos pasado muchas cosas juntos y sé que así seguirá siendo, aunque vengan cambios, siempre estaremos juntos.
¡Muchas gracias por estos 30 años llenos de amor y felicidad!

miércoles, 1 de agosto de 2012

A 11 días y tanto para agradecer

En unos días, cumpliré años y he decidido comenzar una serie para compartir mis razones por las cuales me siento muy agradecido. La he llamado y tanto para agradecer. En esta ocasión es a 11 días y tanto para agradecer.
Quisiera comenzar con el autor de todo, con el Creador, porque a lo largo de tantos años siempre se ha manifestado en mi vida, guiando, iluminando, transformando y también, probando.
Guiando porque siempre me ha mostrado de una forma u otra un camino a seguir, invitándome a un plan, el cual en la gran mayoría de las ocasiones he abrazado, pero también cuando me he alejado, siempre me ha inundado con su gran misericordia.
Me ha iluminado, por la inhabitación Trinitaria, donde hoy agradezco el regalo de la fe; iniciada por el Bautismo, llevada a la plenitud por la Confirmación y robustecida con la Eucaristía frecuente. Ello ha permitido la acción del Espíritu Santo con sus dones y frutos, para así buscar siempre el mejor camino. Pero también para ir en un sentido recto de la vida.
Todos los días me transforma, para invitarme a modificar aspectos de mi vida los cuales entorpecen mi crecimiento, mis sombras, para al lograr reestructurarlas den vida y me plenifiquen.
Pero también, al probarme, ha permitido acrisolar mi fe, sustentar las dificultades en esa fe madura, la cual me ha llevado años construir, pero la cual se ha tambaleado en ocasiones. Pero Dios siempre se ha valido de instrumentos para recordarme su infinito amor por mí, porque me ha demostrado su amor por mí y no por lo hecho o lo omiso.
Son limitadas las palabras para expresar la gratitud por el amor de Dios, porque yo no hice nada para merecerlo, no lo busqué, no lo pedí. Pero desde toda la eternidad, desde el momento en el cual Dios me pensó, me amó, con lo único con lo cual se puede retribuir en algo, es en el amor. Pero creo nunca podré vivir lo suficiente para amarlo con Él me ama, pero al menos lo estoy intentando todos los días y a cada momento.
Un forma en la cual he experimentado ese amor es a través del mayor regalo que me ha hecho, mis padres.