martes, 31 de julio de 2012

La importancia de la congruencia

Es más frecuente encontrar personas quienes no soy congruentes con su obrar y pensar. Ni si quiera son capaces de honrar un compromiso o una promesa, logrando ser indignas de confianza, atención o credibilidad.
Lo peor de la situación, se sienten víctimas de todo su entorno, pero no se dan cuenta de su responsabilidad de su soledad. Hacen imposible convivir con esas personas, porque todo, según ellos, está en su contra, todos conspiran, quieren afectarles o hacerles daño.
La importancia de la congruencia hace tomar consciencia de nuestra responsabilidad en las relaciones interpersonales. No puedo culpar a los otros de mi infelicidad, frustración y odios, porque son enteramente decisión mía, pero también, es mi deber coadyuvar para lograr un clima propicio.
Todo esto se refleja en cualquier grupo de pertenencia humano. En la familia si hay deficiencias en sus miembros será imposible tener una relación de amor, si quiera de tolerancia. La congruencia toma un papel fundamental, porque la familia se sustenta en compromisos de miembros, es decir, saber jugar en equipo, ahora tan de moda con las olimpiadas; pero es una realidad. Basta con uno para ser piedra de tropiezo, se rompe la armonía y no funciona.
Si se analiza este pequeño núcleo humano, el ejercicio se puede hacer una traspolación a cualquier ámbito, la empresa, los amigos, etc.
De ahí, entonces la importancia de la congruencia, porque una persona congruente con su decir y obrar, con su pensar y actuar, permite ser una persona de unión y no de división.

lunes, 30 de julio de 2012

Lo mejor de lo mejor

Llevamos apenas cuatro días de la justa olímpica celebrada en Londres y ya comenzamos a ver lo mejor de lo mejor. Hemos visto grandes encuentros deportivos en las primeras disciplinas, gimnasia, canotaje, tiro con arco, football, basketball, volleyball, entre otros.
Destacamos la actuación del equipo de tiro con arco de la representación nacional, quienes tuvieron una destacada actuación, logrando un decoroso cuarto lugar, derrotando a equipos fuertes, dejando el nombre de México en alto.
Por otro lado, hoy México tuvo una medalla de plata gracias a los clavadistas Germán Sánchez e Iván García. Una espectacular demostración por parte de los jóvenes tapatíos, consolidando a nuestro país como potencia en la plataforma.
Todos los participantes han demostrado su calidad humana, pero demostrando la capacidad del hombre para vencerse a sí mismo y dar un poco más, siempre más fuerte, más lejos y más alto.
Los Juegos Olímpicos como le mencionado, sacan lo mejor de los hombres. Les permite vivir dentro de un espíritu de competencia sano, contra los mejores del mundo, pero también contra sí mismos. Es buscar demostrarse a sí mismos la inexistencia de límites si se trabaja con voluntad y dedicación.
Gran fiesta la de las Olimpiadas, seguiremos disfrutando de tan magno acontecimiento.

domingo, 29 de julio de 2012

Todo mi poseer

En el XVII Domingo del Tiempo Ordinario (Jn 6, 1 – 15), recordamos el milagro de la multiplicación de los panes.
“Después de esto, Jesús atravesó el mar de Galilea, llamado Tiberíades. Lo seguía una gran multitud, al ver los signos que hacía curando a los enfermos. Jesús subió a la montaña y se sentó allí con sus discípulos.
Se acercaba la Pascua, la fiesta de los judíos. Al levantar los ojos, Jesús vio que una gran multitud acudía a él y dijo a Felipe: "¿Dónde compraremos pan para darles de comer?". El decía esto para ponerlo a prueba, porque sabía bien lo que iba a hacer. Felipe le respondió: "Doscientos denarios no bastarían para que cada uno pudiera comer un pedazo de pan".
Uno de sus discípulos, Andrés, el hermano de Simón Pedro, le dijo: "Aquí hay un niño que tiene cinco panes de cebada y dos pescados, pero ¿qué es esto para tanta gente?". Jesús le respondió: "Háganlos sentar". Había mucho pasto en ese lugar. Todos se sentaron y eran uno cinco mil hombres.
Jesús tomó los panes, dio gracias y los distribuyó a los que estaban sentados. Lo mismo hizo con los pescados, dándoles todo lo que quisieron. Cuando todos quedaron satisfechos, Jesús dijo a sus discípulos: "Recojan los pedazos que sobran, para que no se pierda nada".
Los recogieron y llenaron doce canastas con los pedazos que sobraron de los cinco panes de cebada. Al ver el signo que Jesús acababa de hacer, la gente decía: "Este es, verdaderamente, el Profeta que debe venir al mundo".
Jesús, sabiendo que querían apoderarse de él para hacerlo rey, se retiró otra vez solo a la montaña”.
Jesús siempre busca la oportunidad para retarnos para dar más allá de lo cual creemos somos capaces de dar. Cristo venía de una gira y acababa de llegar a Tiberíades, había cruzado el mar de Galilea, pero no había tiempo para perder, la gente le esperaba para ser curada, no sólo físicamente, sino espiritualmente.
Lanza el reto a Felipe, ¿dónde compraremos pan? Los límites humanos comienzan a buscar peros y a dar trabas al proyecto de Dios, nos ahogamos en las pruebas, buscamos racionalizar todas las soluciones posibles sin confiar en quien nos ha dado el reto.
El lado humano reacciona, pero si ni con tanto dinero podremos darles de comer, no basta. Andrés un poco más atrevido, advierte de un muchacho, alguien buscar ir más allá, porque quiere ofrecer una solución atrevida, poniendo a disposición todo para dar una respuesta a un reto de Jesucristo.
El muchacho se había guardado sus panes y sus peces para él por si acaso, pero al final se dio cuenta que era mejor poner todo su poseer para lograr el milagro. Es cuando Cristo puede hacer de nuestra persona una gran obra.
De los cinco panes y dos peces logró dar de comer a todas personas presentes. Pero se logró el milagro por compartir, porque el hombre no puso limitantes a Jesús, comprendía el muchacho la importancia de la confianza en Cristo.
De la colaboración del hombre, cuando aporta su pequeñez, Dios multiplica el esfuerzo, incluso Cristo nos enseña a ello, lo vemos en la Misa al partir el Pan, al fraccionar su Cuerpo para ser repartido en la asamblea.
Aprender a vivir desprendido, permite vivir en la verdadera felicidad del dar, de esperar en Dios, de ayudar con el proyecto de Dios y ser fuente de vitalidad a los demás. Cuando regalamos si quiera una sonrisa, la alegría se multiplica.
Aprender a vivir desprendido, también nos permite ir más allá y estar en todo y apoyar en todo en las necesidades de nuestros próximos, aunque pudiéramos pensar, nos quedamos sin nada. Dios no es ciego y valora nuestros esfuerzos.

sábado, 28 de julio de 2012

Las "Pejeolimpiadas"

Bienvenido Londres

No hay plazo que no se cumpla, ni fecha que no llegue, así es, después de siete años del anuncio en Singapur de la sede de los Juegos Olímpicos del 2012, Londres abre sus puertas al mundo para brindar uno de los espectáculos deportivos más importantes.
Hace siete años, las ciudades las cuales buscaban ser sede de las Olimpiadas se preparaban con propuestas, diseños y con fuertes campañas de publicidad para ello. París buscaba ser la ciudad sede, ofreciendo el glamour propio de la capital francesa. Por su parte Madrid había tapizado la ciudad con el logotipo de Madrid 2012, los españoles ofrecían su típica hospitalidad. Pero fueron los ingleses quienes les arrebataron a ambos la sede de la justa olímpica.
Los ingleses, orgullosos de su historia, ofrecieron una espectacular ceremonia de apertura, la cual estuvo cargada de elementos muy emotivos y con la presencia de grandes artistas. Cabe destacar el toque de humor en la llegada de la Reina Isabel II, escoltada por James Bond y en un paracaídas.
Estos Juegos Olímpicos prometen mucho, porque al final, permiten demostrar características superiores de los hombres, destacando el compañerismo, la amistad, la pasión, la entrega, voluntad, disciplina, pero lo más importante el amor a su deporte.
¡Bienvenido Londres y a disfrutar de este maravilloso evento deportivo!

martes, 24 de julio de 2012

Martes de clásicos... La séptima luna

El aventar cargas a otros

En la vida siempre hay momentos complicados, dificultades a sortear, pruebas a superar y obstáculos por vencer. La grandeza y el éxito de las personas, se miden no por las obras realizadas, por el dinero generado o por una fama vana, sino por su capacidad de sobreponerse a los retos de la vida y seguir sonriendo, sin perder su paz interior.
Pero eso sí, una persona tiene derecho a sentir y experimentar tristeza, amargura, contrariedad y decepción, pero no se vale el aventar cargas a otros. Porque al final del día somos responsables de las decisiones tomadas, de los caminos elegidos y de nuestra forma de reaccionar frente a los embates.
Cuando se vive en comunidad, se debe buscar al final del día contribuir en la medida de nuestras posibilidades a hacer más llevadera la carga de la vida cotidiana, no a ser piedra de tropiezo y de contrariedad.
Al final, la caridad debe ser privilegiada para encontrar los puntos de unión y no acentuar los defectos del otro, porque es una prueba de inmadurez pensar que el otro está mal cuando no me he visto mi reflejo, sin darme cuenta de mi contribución al encono y al odio.
Lo más sencillo es tirar la toalla y echar la culpa a los otros de las cosas por las cuales yo soy responsable. La vida es asumir mi responsabilidad para dejar de aventar cargas a otros por mis estupideces e inmadureces.

domingo, 22 de julio de 2012

Todos somos responsables

El XVI Domingo del Tiempo Ordinario (Mt 6, 30 – 34), Cristo nos recuerda una realidad, todos somos responsables del rebaño.
“Los Apóstoles se reunieron con Jesús y le contaron todo lo que habían hecho y enseñado. El les dijo: "Vengan ustedes solos a un lugar desierto, para descansar un poco". Porque era tanta la gente que iba y venía, que no tenían tiempo ni para comer. Entonces se fueron solos en la barca a un lugar desierto.
Al verlos partir, muchos los reconocieron, y de todas las ciudades acudieron por tierra a aquel lugar y llegaron antes que ellos. Al desembarcar, Jesús vio una gran muchedumbre y se compadeció de ella, porque eran como ovejas sin pastor, y estuvo enseñándoles largo rato”.
Es curioso el inicio del Evangelio, porque vemos a un Jesús un poco más humano, es decir, alguien quien se preocupa por el descanso de sus discípulos después de una larga jornada. Era necesario recuperar las fuerzas para seguir, pero también daría una oportunidad de convivencia.
Pero al final, no se pudo dar, porque las personas quienes se encontraban en el lugar deseaban estar con Jesús y sus discípulos. Como dice el texto, se encontraban como ovejas sin pastor.
La escena es tan familiar, porque hoy es tan común tener esa sensación, la de estar a la deriva, perdido, sin una luz o una guía. Pero es cuando recordamos ese aspecto, Cristo se hace presente en nuestros pastores, en nuestros padres, profesores, amigos, hermanos, para encontrar el camino adecuado en el momento justo.
Es así cuando también nosotros tomamos consciencia de nuestro papel de pastores de un rebaño al cual debemos cuidar; los padres a sus hijos, los amigos entre amigos, los profesores a sus alumnos. Así nos damos cuenta sobre la realidad de la vida, no estamos solos y somos compañeros del camino.
Nosotros con nuestro obrar podemos ser facilitadores del paso del Señor a través nuestro para los demás, nos convertimos en señal de luz y de esperanza, pero también nos convertimos en buena nueva. Pero también, podemos ser piedra de tropiezo para otros, cuando actuamos de forma inmadura, o buscamos llevarnos a los otros en nuestro propio camino a la perdición.
Por tanto todos somos responsables de nuestro rebaño, del ejemplo y testimonio brindado, pero también debemos cuidar de los malos ejemplos para no ser piedra de tropiezo para otros.

sábado, 21 de julio de 2012

Un gran encuentro

Pocas son las ocasiones en las cuales uno tiene la oportunidad de conocer a personas a quien admira por su capacidad de expresión artística, por su calidad humana, por alguna hazaña o por una combinación de las anteriores. Su servidor tuvo un gran encuentro con una gran pintora, Maru Vázquez.
Maru ha plasmado su visión del mundo en unos lienzos, permitiendo compartir su arte de formas muy diversas, muchas de ellas revelan un corazón abierto al mundo y deseoso llenar de luz al mundo.
Les dejaré unas muestras de su talento, directas de su blog, el cual pueden consultar, http://maruvazquez-maruvazquez.blogspot.mx/

miércoles, 18 de julio de 2012

Un poco de humor político... El berrinche de AMLO

Un poema para un miércoles de nostalgia

“Regala tu ausencia a quien no supo valorar tu presencia y recuerda que quien mucho se ausenta pronto deja de hacer falta.
Nadie vale lo suficiente como para dejarte colgado en recuerdos, si de verdad valdría estaría creando presentes contigo; y por último nada ni nadie es imprescindible, si quieres una vida feliz átala a metas y sueños propios, con gente que te apoya, no a objetos ni personas que no te valoran”.
Anónimo

martes, 17 de julio de 2012

La política y el honor

En México estamos siendo testigos del desprestigio de una gran parte de la clase política, la fracción izquierda está secuestrada por un falso mesías, pero la derecha está captada por mezquinos intereses de incompetentes politiqueros.
La política y el honor son correlativos, no se puede realizar la una sin la otra. La política requiere del honor porque permite privilegiar los espacios de diálogo, concertacesión y lo más importante acuerdos.
Cuando se busca tratar de hacer política sin honor se ven los resultados actuales, falsos mesías buscando anular una elección, sin analizar en conjunto todo el proceso electoral. Porque como perdió la presidencia, la cuál es la única importante para él, no se ha molestado en atender el resto de la jornada en cuando a los Congresos, tanto el Federal como algunos Locales y Gobiernos estatales.
Según actuando de forma responsables, está convocando a incendiar el país y seguir sembrando el odio y el encono. Insiste en manchar sólo el proceso presidencial porque no fue favorecido con la mayoría, porque quienes no simpatizamos con su proyecto elegimos otro. ¿Ese es un político con honor? La respuesta es no, es un sinvergüenza, ambicioso, manipulador.
Por su parte la derecha cada vez ha mostrado su incapacidad fruto de la improvisación de políticos. Buscan navegar con bandera de demócratas, porque son incapaces de reconocer su derrota en la oportunidad de la alternancia.
México requiere una renovada clase política, la cual recuerde la importancia del honor para servir a su país.

domingo, 15 de julio de 2012

Sacudirse el polvo de los pies

Nuestro itinerario dominical nos lleva al XV Domingo del Tiempo Ordinario (Mc 6, 7 – 13) donde Cristo nos invita a seguirle de una forma más radical.
“Entonces llamó a los doce y los envió de dos en dos, dándoles poder sobre los espíritus impuros. Y les ordenó que no llevaran para el camino más que un bastón; ni pan, ni alforja, ni dinero; que fueran calzados con sandalias, y que no tuvieran dos túnicas.
Les dijo: "Permanezcan en la casa donde les den alojamiento hasta el momento de partir. Si no los reciben en un lugar y la gente no los escucha, al salir de allí, sacudan hasta el polvo de sus pies, en testimonio contra ellos".
Entonces fueron a predicar, exhortando a la conversión; expulsaron a muchos demonios y curaron a numerosos enfermos, ungiéndolos con óleo”.
“Entonces llamó a los doce”, el evangelio habla siempre muy claro de la elección de Jesucristo. La escena debe haber sido conmovedora, entre toda la multitud escogió a algunos para ser dispensadores de su gracia.
La emoción del sentirse elegido, de sentirse tocado, por Jesús debe desbordar los corazones y debe llenar de esperanza a los escogidos. Esa mirada de amor, debía de ser capaz de dejar de lado todo “con tal de ganarse a Cristo”.
La misión para la cual Cristo nos llama es muy demandante, es extrema, porque implica una renuncia total para ir a anunciar la buena nueva. Las recomendaciones evangélicas fueron de no llevar nada, para ir entonces a donde la Providencia nos guíe.
Pero si no somos congruentes y no vivimos de acuerdo al proyecto de Cristo corremos el peligro de ser piedra de tropiezo para quienes buscan a Jesús. Pensemos por un momento cuántas personas tuvieron que sacudirse el polvo de los pies de nosotros, porque no dimos testimonio del Maestro.
En este domingo es importante no confundir vocación con llamado, menos con trabajo. Por eso podemos recordar, la vocación a la cual estamos invitados es a lo grande, a ser santos y felices. El llamado es para dar una respuesta concreta a ese estilo de vida y en cada circunstancia reflejar a Cristo con nuestra forma de obrar, de actuar, pero lo más importante de amar.

sábado, 14 de julio de 2012

La intolerancia y el capricho

A varios días de concluidos los comicios electorales, seguimos expectantes frente a la actitud de ciertos actores políticos quienes la intolerancia y el capricho no les permiten ver la realidad de su derrota en las urnas.
Han comenzado a tomar una actitud irresponsable y poco democrática al querer desprestigiar todo el proceso electoral. Denuncian prácticas sin pruebas y pretenden invalidad la elección.
Justo por no tener pruebas contundentes, las instancias electorales desecharán las inconformidades y seremos rehenes de unos demócratas autoritarios. Ya próximamente estaremos secuestrados por unos fundamentalistas, víctimas de la manipulación siniestra de un personaje quien tiene captada la izquierda.
La irresponsabilidad tiene polarizada a gran parte de la población, porque el falso mesías de la “república amorosa” está sacando ya su verdadera personalidad, quien ha sembrado el odio y la discordia.
Con estas demostraciones, sólo queda en evidencia el pobre nivel de democracia de nuestro país, porque no existen valores fundamentales como el respeto, la tolerancia y el diálogo.
Ojalá recapacitaran en sus posturas por el bien de México, porque al final también se están vulnerando las instituciones, las cuales han sido fruto de muchos años de esfuerzos y peligran por un necio.

martes, 10 de julio de 2012

El peligro de acostumbrarse a Dios

En la vida ordinaria, en la cotidianeidad, se corre el peligro de acostumbrase a las cosas de Dios. Es decir, perder el sentido de gratitud sobre los dones recibidos, incluso las adversidades y los retos.
Dios es tan maravilloso, porque siempre respeta la libertad de sus creaturas, nos deja ser, nos da espacio, margen de maniobra, pero ello trae como consecuencia el querer buscar encerrar a Dios a nuestra conveniencia.
Si encasillamos a Dios, no le dejamos ser a Dios, Dios; es cuando vienen las dificultades, porque la fe no está sustentada en el amor a Dios. Es curioso pero es cuando nosotros comenzamos a creernos jueces de los demás, somos como fariseos de los tiempos de Cristo.
Más aún, queremos pretender vivir como si Dios no existiera y no tuviera nada nuevo que decirnos; como si fuera una realidad fuera a la nuestra y mientras, según nosotros, lo conocemos más, es cuando lo perdemos más.
Por eso, es importante, vivir con la sorpresa de la fe, con la alegría de la esperanza y con la fuerza del amor. Hay que dejar a Dios ser Dios y permitirle actuar en nuestra vida, aceptar su proyecto y al final siempre nos sorprenderá, porque viviremos en la auténtica libertad.

domingo, 8 de julio de 2012

En su pueblo, en su familia o en su casa

Llegamos al XIV Domingo del Tiempo Ordinario (Mc 6, 1 – 6), el itinerario presenta una dificultad común y una tentación al desaliento.
“Jesús salió de allí y se dirigió a su pueblo, seguido de sus discípulos. Cuando llegó el sábado, comenzó a enseñar en la sinagoga, y la multitud que lo escuchaba estaba asombrada y decía: "¿De dónde saca todo esto? ¿Qué sabiduría es esa que le ha sido dada y esos grandes milagros que se realizan por sus manos?
¿No es acaso el carpintero, el hijo de María, hermano de Santiago, de José, de Judas y de Simón? ¿Y sus hermanas no viven aquí entre nosotros?". Y Jesús era para ellos un motivo de tropiezo.
Por eso les dijo: "Un profeta es despreciado solamente en su pueblo, en su familia y en su casa". Y no pudo hacer allí ningún milagro, fuera de curar a unos pocos enfermos, imponiéndoles las manos. Y él se asombraba de su falta de fe. Jesús recorría las poblaciones de los alrededores, enseñando a la gente”.
En la vida espiritual, muchas veces nos enfrentamos al dilema de Jesús, nadie es profeta en su pueblo, en su familia o en su casa. Las persecuciones al interior de los círculos más próximos se vuelven más feroces, porque se conoce a la perfección a la persona.
Es muy común escuchar las palabras del Evangelio, ¿de dónde saca todo esto? ¿Qué no vive entre nosotros? Duras palabras, pero ciertas, en muchas ocasiones se nos señala de ser candil de la calle y oscuridad de la casa. En otros ambientes somos reconocidos pero al ingresar a la casa es otra historia, debido a la incapacidad de reconocer lo bueno entre los propios.
El reto es claro, ayudar a los demás a no ser motivo de tropiezo, por el contrario, buscar el bien de todos los cercanos, logrando lo imposible, la caridad oculta. Cuando se logra vivir en ese ideal, no importará el ser o no reconocidos porque se sabe se trabaja por Cristo y es importante detenernos para pensar en ello.
La caridad oculta al interior del círculo cercano es lo más complicado para vivir, es un ideal muy alto, claro al estilo de Jesús. Lograr la armonía, la paz, la cohesión, pero lo más importante el amor.

sábado, 7 de julio de 2012

Ser uno mismo

En la presente entrega sobre la transformación, abordaremos el tema desde la perspectiva del proceso para llegar a ser uno mismo. Ese proceso es la vía permanente para lograr la transformación en nuestras vidas.
El punto de partida, radica en la voluntad de buscar el sentido a la vida, sustentado en el espíritu de transformación; el punto de llegada será la unión de opuestos en una sola persona, en el yo. Cuando se logra la unión armónica es cuando se puede hablar de ser uno mismo.
Los elementos constitutivos de mayor conflicto en el hombre se encuentran en el espíritu y el instinto. Pero cada uno requiere una forma de transformación en lo particular.
En el caso del instinto requiere transformar los arquetipos, es decir, el patrón cuyo ejemplo se toma para derivar ideas, objetos o conceptos. En esos modelos (arquetipos) es donde nuestros ritos y símbolos son elevados al plano consciente.
De ahí derivan muchas de las actitudes tomadas frente a la realidad, las cuales, hemos dejado de realizar de forma consciente por el nivel de automatización. Incluso, no sabemos el porqué reaccionamos de determinada forma ante cierto estímulo. Por ejemplo las fobias, filias, donde no comprendemos conscientemente el porqué sentimos atracción o repulsión hacia cierto aspecto.
La transformación consiste para el instinto, de identificar patrones para así lograr oponerlos frente al espíritu y ver si son convenientes para mi proceso. Con ello permitimos concientizar los sentimientos, lograr un balance entre el sentimiento y la razón; logrando un diálogo entre ellos.
Un camino seguro es aprender el valor de la introversión, porque también permite fluir al interior y así poder librarnos del peso del pasado. El instinto hace retornar a lo caminado, para tomar un referente, pero eso sólo anquilosa la forma de andar, porque es regresar a un patrón una y otra vez. El seguir con lo mismo, sólo logra estancarnos. Hay un dicho muy cierto, si quieres resultados diferentes, comienza realizando cosas diferentes.
Con ello, es posible cobrar vitalidad en la vida, dar pasos seguros a la transformación. Pero requiere un trabajo hacia el interior, para tirar los arquetipos con los cuales se ha vivido, para dar paso a una experiencia de vida plena.

miércoles, 4 de julio de 2012

Un toque de fantasía


Una de mis películas favoritas es Medianoche en París (Midnight in Paris) del gran cineasta Woody Allen, la cual nos permite recordar la importancia de tener en nuestra vida un toque de fantasía.

La cinta versa sobre una joven pareja de prometidos y la familia de la novia, quienes hacen un viaje a París, previo a la boda. Pero todo cambia cuando el protagonista pasea por el Barrio Latino en donde comienza lo increíble de la película, porque conocerá a sus ídolos y maestros quienes inspiraron su trabajo.

El largometraje ya no se encuentra en cartelera, pero es sencillo de conseguir. La cinta nos inspira a perseguir los sueños y a nunca darnos por vencidos. De las mejores piezas de Woody Allen.

lunes, 2 de julio de 2012

Una hora después

Llegó el día de las elecciones, la voluntad popular se expresó de una u otra forma en las urnas, se obtuvo un resultado; el cual en honor a la verdad, era esperado. Algunos tomando una actitud republicana reconocieron el resultado adverso, demostrando el compromiso con la democracia.
Pero no fue el caso de algunos contendientes y simpatizantes, porque una hora después comenzaron las descalificaciones, reclamos, burlas y mofas al proceso democrático. La falta de madurez se ha hecho presente y latente, al final, se recoge lo sembrado, el odio.
Para pretender vivir una democracia debe ser más que un simple voto, debe ser una actitud permanente de aceptar y tolerar las opiniones, puntos de vista y postulados del otro; estar abierto al diálogo y al debate de ideas. A no expresar estúpidamente, odio a tal, por el hecho de ser diferente a mí.
Pero ante todo ello, sólo podemos hacer una reflexión la cual nos puede servir para mejorar como país, pero en especial como persona. En una conferencia ofrecida por su servidor, retomaba un consejo dado por un gran amigo, el cual quiero retomar.
La reflexión versa sobre nuestras posturas frente a lo diferente, la primera, frente a lo diferente, busco destruirlo porque justo eso, es diferente a mí, que no quede nada de ello. La segunda postura, un poco más astuta, busco amoldarlo y manipularlo para hacerlo como yo. La tercera es la más congruente, ante lo diferente busco complementar mis limitaciones con la perspectiva del otro, así ambos nos enriquecemos, porque me di la oportunidad de conocer, dejar ser libre al otro.
En fin, son muchas las cosas para aprender, pero algo claro, nunca cerrarnos al encuentro del otro.

domingo, 1 de julio de 2012

¡Tócale!

Llegamos al XIII Domingo del Tiempo Ordinario (Mc 5, 21 – 43), Cristo quiere hacerse presente en nuestra vida, pero también quiere nuestra colaboración en el proceso.
“Cuando Jesús regresó en la barca a la otra orilla, una gran multitud se reunió a su alrededor, y él se quedó junto al mar.
Entonces llegó uno de los jefes de la sinagoga, llamado Jairo, y al verlo, se arrojó a sus pies, rogándole con insistencia: "Mi hijita se está muriendo; ven a imponerle las manos, para que se cure y viva". Jesús fue con él y lo seguía una gran multitud que lo apretaba por todos lados.
Se encontraba allí una mujer que desde hacía doce años padecía de hemorragias. Había sufrido mucho en manos de numerosos médicos y gastado todos sus bienes sin resultado; al contrario, cada vez estaba peor.
Como había oído hablar de Jesús, se le acercó por detrás, entre la multitud, y tocó su manto, porque pensaba: "Con sólo tocar su manto quedaré curada". Inmediatamente cesó la hemorragia, y ella sintió en su cuerpo que estaba curada de su mal.
Jesús se dio cuenta en seguida de la fuerza que había salido de él, se dio vuelta y, dirigiéndose a la multitud, preguntó: "¿Quién tocó mi manto?". Sus discípulos le dijeron: "¿Ves que la gente te aprieta por todas partes y preguntas quién te ha tocado?".
Pero él seguía mirando a su alrededor, para ver quién había sido. Entonces la mujer, muy asustada y temblando, porque sabía bien lo que le había ocurrido, fue a arrojarse a sus pies y le confesó toda la verdad. Jesús le dijo: "Hija, tu fe te ha salvado. Vete en paz, y queda curada de tu enfermedad".
Todavía estaba hablando, cuando llegaron unas personas de la casa del jefe de la sinagoga y le dijeron: "Tu hija ya murió; ¿para qué vas a seguir molestando al Maestro?".
Pero Jesús, sin tener en cuenta esas palabras, dijo al jefe de la sinagoga: "No temas, basta que creas". Y sin permitir que nadie lo acompañara, excepto Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago, fue a casa del jefe de la sinagoga. Allí vio un gran alboroto, y gente que lloraba y gritaba.
Al entrar, les dijo: "¿Por qué se alborotan y lloran? La niña no está muerta, sino que duerme". Y se burlaban de él. Pero Jesús hizo salir a todos, y tomando consigo al padre y a la madre de la niña, y a los que venían con él, entró donde ella estaba.
La tomó de la mano y le dijo: "Talitá kum", que significa: "¡Niña, yo te lo ordeno, levántate". En seguida la niña, que ya tenía doce años, se levantó y comenzó a caminar. Ellos, entonces, se llenaron de asombro, y él les mandó insistentemente que nadie se enterara de lo sucedido. Después dijo que le dieran de comer”.
Conforme avanzamos en el Evangelio, vemos dimensiones y aspectos diferentes de Jesús, lo cuales nos cautivan, confortan, transforman, pero también apelan a nuestra forma de comportarnos y de vivir en coherencia.
En el pasaje anterior, nos identificamos con los actores del mismo, porque hemos experimentado cada uno de los sentimientos frente a las dificultades a las cuales estamos llamados a superar.
Jairo conocía la fama de Jesús, estaba desesperado, aún en contra de su propia condición por ser jefe de la sinagoga, pero no importaba, buscaba al dueño de la vida para realizar el milagro esperado.
Es así cuando busca desesperado a Jesús para pedirle fuera a ver a su hija. Ahí es dónde comprendemos el porqué experimentamos la desolación, porque nos hace falta fe. En ocasiones pensamos, equivocadamente, que Dios nos ha abandonado y no se hace presente en nuestra vida, pero Cristo nos demuestra nuestro error. El problema de raíz fue, la falta de fe.
En el trayecto, vemos a una mujer, cuya fe le bastaba para darse cuenta de su necesidad de estar con el Maestro. Tiene una grave aflicción, no había puesto su confianza en donde debiera, pero cuando se decide a hacerlo, encuentra la salvación y el milagro esperado.
La mujer se daba cuenta, bastaba con tocarlo, estar en su presencia, ni siquiera pedirlo, Jesús ya sabía, ahí demuestra su conocimiento a la perfección de cada uno de nosotros.
La respuesta ante la fe de la mujer fue curiosa, porque pregunta, ¿quién me ha tocado? Palabras llenas de amor, quisiera tratar de comprender por un momento el sentir de Jesús, porque ese encuentro le tocó su vida.
De ambos casos, vemos las reacciones humanas, la mujer se abalanzó a los pies agradecida, porque ha sido curada, no sólo físicamente, sino en todo su ser. De ese encuentro tendría la vida eterna.
Jairo seguía perplejo el milagro, mientras le llevaban la noticia de la muerte de su hija. En similares circunstancias cualquiera podría desmoronarse, pero no Jairo, incluso sus cercanos le insistían a dejar de molestar al Maestro, pero no lo hizo.
Ambas reacciones de fe, porque la hija de Jairo resucitó, el milagro se hizo porque confió más en el Maestro, abrió su corazón a la fe.
De todo ello, comprendemos la importancia de tocar con la fe a Cristo, ese es el mensaje de este domingo, toca a Cristo, ¡tócale! Así tu vida cambiará.