La noche de ayer los candidatos al Gobierno del Estado de México sostuvieron un tercer debate, el cual fue conducido por Joaquín López Dóriga en Televisa. El formato del encuentro permitió un poco de mayor libertad de interacción, de cuestionamientos y de réplicas.
El debate transcurrió como los anteriores, con un Alejandro Encinas con ataques frontales a Eruviel Ávila y rematando a Luis Felipe Bravo Mena, a quien lo introdujo como “lo que queda del candidato del PAN”. Eruviel Ávila hizo frente a los dichos de Alejandro Encinas con números reales y estadísticas oficiales, a diferencia del candidato del PRD se basó en cifras equivocadas y alteradas.
Las propuestas presentadas no variaron al debate anterior, Eruviel fue quien presentó las más concretas y en mayor número. Alejandro Encinas hizo los mismos señalamientos e hizo hincapié en su supuesto éxito en su gestión al frente del Distrito Federal. Por su parte Luis Felipe Bravo se mostró nervioso, confuso, vacilante, inseguro, ello afectó su rendimiento en el debate y no concretó ninguna propuesta en particular.
Cambian las perspectivas de los electores y se van conformando las preferencias, ello sobre la base del debate de ayer. Alejandro Encinas está prometiendo llevar el debate sobre temas muy delicados, como lo es la unión entre homosexuales, el aborto y la adopción por parte de personas del mismo sexo, por tanto, quiere minar la estructura esencial de la sociedad, la familia. Una persona comprometida con la vida y los valores no puede estar con la propuesta del candidato Encinas, es reprobable esos planteamientos en la falacia de representar un estado de vanguardia.
En eso se elogia la perspectiva del abanderado del PAN quien prometió no hacer cambios al respecto. Eruviel puede perder el rumbo si permite la apertura de esos debates de temas controvertidos de los cuales un gran porcentaje de la sociedad se ha manifestado estar en contra.
De todas maneras, Eruviel Ávila sigue construyendo la plataforma para convertirse en el próximo Gobernador del Estado de México, pero esperemos no se equivoque al apoyar la agenda de la autodenominada “comunidad gay”. Celebro su posición de no permitir la adopción de niños por parte de homosexuales.
Al día siguiente del debate, se movieron los porcentajes de las encuestas:
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